México.- El “squirt” o eyaculación femenina es un fenómeno que ha despertado interés y debate en el ámbito de la sexualidad femenina. Aunque no todas las mujeres lo experimentan, quienes lo han vivido describen una sensación única de placer, marcada por la expulsión involuntaria de un fluido abundante y transparente, diferente de la eyaculación femenina tradicional.
De acuerdo con la sexóloga Marta Torres, el squirt puede intensificar el placer en los orgasmos. Sin embargo, no todas las mujeres lo asocian con mayor satisfacción sexual, ya que su experiencia puede variar significativamente. La sexóloga Nadine Terrein Roccatti asegura que la calidad de un orgasmo no depende de este fenómeno y recalca que solo un 10% de las mujeres lo experimentan de manera frecuente, según datos recopilados por El País.
Te recomendamos: Ucrania acusa a Rusia de derribar avión de Azerbaijan Airlines
Diferencias entre squirt y eyaculación femenina
Aunque ambos procesos están relacionados con la respuesta sexual, el squirt y la eyaculación femenina no son lo mismo. La doctora Ana Lombardía, autora del blog Sexo en la Piel, detalla que:
- Squirt: Es un líquido claro y acuoso expulsado desde la vejiga a través de la uretra. Este suele ser más abundante y, en ocasiones, está vinculado a la estimulación del punto G.
- Eyaculación femenina: Proviene de las glándulas de Skene, situadas en la parte anterior de la vagina. Su fluido es blanquecino, espeso y mucho menos abundante, llegando a confundirse con la lubricación vaginal.
¿Cómo lograr un squirt?
Aunque no todas las mujeres lo logran, explorar el cuerpo y conocer las zonas que generan placer es un buen comienzo. La estimulación del punto G, ubicado a 2-5 cm dentro de la vagina, es clave para desencadenar este fenómeno. Según el portal especializado Healthline, la masturbación puede ser una herramienta útil para descubrir las sensaciones que lo propician.
En pareja, ciertas posiciones sexuales como “la vaquera”, “la cucharita” o “el misionero con las piernas en los hombros” pueden facilitar la estimulación profunda del punto G. Lo importante es relajarse, disfrutar el momento y no obsesionarse con el resultado.
El squirt no es un indicador de una vida sexual plena ni un objetivo obligatorio. Expertas como Kitty May, del blog de Clear Blue, enfatizan que cada mujer vive su sexualidad de manera única y que este fenómeno no define la calidad de un orgasmo.
Finalmente, la doctora Otalora subraya que cualquier mujer puede experimentar un squirt en algún momento de su vida sexual, pero también es completamente normal si nunca sucede. La clave está en disfrutar cada experiencia sin presiones y explorar lo que más placer genera.
