Barcelona, España.- La majestuosa Basílica de la Sagrada Familia en Barcelona está próxima a alcanzar un hecho histórico. Después de más de un siglo y medio de construcción, se ha fijado la fecha para su finalización en el año 2026, confirmado por autoridades y funcionarios implicados en el proyecto.
Este anuncio marca un momento trascendental en la historia de la arquitectura y la cultura española. El presidente de la organización encargada de terminar la obra maestra del arquitecto Antoni Gaudí anunció la fecha el pasado miércoles, misma que coincidirá con el centenario de la muerte del arquitecto del edificio.
El proceso de construcción de la Sagrada Familia, diseñada por el renombrado arquitecto catalán, comenzó en 1882. A lo largo de los años, esta obra maestra ha sido testigo de períodos de interrupción, incluidos los causados por la Guerra Civil Española y la reciente pandemia de COVID-19. Sin embargo, a pesar de estos obstáculos, el proyecto ha perseverado, gracias al compromiso continuo de los que están dedicados a verlo completado.
La culminación de la estructura de la basílica se producirá con la construcción de la última de las seis torres, la torre de Jesucristo, que se espera alcance una altura de 172,5 metros y esté rematada por una cruz de 17 metros de altura. Marcando no solo la conclusión física de la Sagrada Familia, también convirtiéndola en la iglesia más alta del mundo, superando a la catedral de Ulm en Alemania.
La importancia de esta finalización va más allá de lo meramente arquitectónico. La Sagrada Familia es un símbolo de la perseverancia humana y la dedicación al arte. Su completitud será un testimonio del compromiso de generaciones de trabajadores y devotos que han contribuido a su realización a lo largo de los años.
Desde hace décadas, el turismo garantiza unos ingresos constantes, con cerca de 5 millones de visitantes al año que pagan entre 25 y 40 euros por visita (452 y 723 pesos). Algo más de la mitad de los 125 millones de euros (2 mil 260 millones 680 mil pesos) que se utilizan a terminar las obras.
Sin embargo, la finalización de la construcción no marcará el fin de los trabajos en toda la obra. Se espera que las labores de escultura, detalles decorativos y la controvertida escalera que conduce a la entrada principal continúen hasta el año 2033. La escalera, parte integral del plan original de Gaudí según los responsables del proyecto, ha generado debate entre los estudiosos, pero se considera esencial para completar la visión del arquitecto.
A pesar de los desafíos y contratiempos a lo largo de su historia, la basílica ha resistido y se ha convertido en un icono mundialmente reconocido. Atrae a millones de visitantes cada año, proporcionando ingresos vitales para su finalización. La culminación de esta obra maestra será un momento de celebración no solo para Barcelona y España, sino para el mundo entero, una culminación de arte y perseverancia que perdurará a lo largo de los siglos.
