Ciudad de México.- El pasado lunes 17 de junio, Ceci Flores, reconocida activista y fundadora del colectivo Madres Buscadoras de Sonora, permaneció ilocalizable durante varias horas, generando preocupación sobre su posible desaparición. Flores, quien ha sido amenazada de muerte debido a su incansable búsqueda de personas desaparecidas, cuenta con protección federal y suele llevar un botón de pánico para monitorear su seguridad. Sin embargo, este dispositivo no funcionó adecuadamente durante la jornada, según su hijo Jesús Adrián.
La activista había viajado desde la Ciudad de México a Querétaro tras la presentación de su libro. Su familia perdió contacto con ella alrededor de la 1:40 de la madrugada del lunes, cuando su chofer aseguró haberla dejado en la central camionera de Querétaro. Preocupados por su falta de respuesta y la desconexión de sus teléfonos, sus hijos, Jesús Adrián y Milagros, contactaron a las autoridades.
Las autoridades de Querétaro tardaron más de ocho horas en decidir entrar a la casa donde se encontraba, argumentando que era propiedad privada. Durante este tiempo, sus hijos intentaron localizarla desesperadamente.
La situación se resolvió solo después de que su hija Milagros publicara un video en redes sociales solicitando explícitamente que las autoridades ingresaran al domicilio, donde finalmente encontraron a Ceci Flores en malas condiciones de salud.
Flores fue trasladada a un hospital donde recibió atención médica durante más de 12 horas. Se le diagnosticó un esguince cervical, deshidratación severa y complicaciones derivadas de un golpe sufrido en un accidente de tránsito. En un video desde su cama de hospital, agradeció a las autoridades y a la Cruz Roja por su asistencia, y confirmó que su estado de salud había mejorado, aunque requería descanso y recuperación.
La situación ha puesto de manifiesto graves deficiencias en el sistema de protección para defensores de derechos humanos en México. Jesús Adrián criticó la falta de apoyo en Ciudad de México, donde asegura que su madre nunca ha recibido la misma protección que en Sonora. A pesar de estar inscrita en el Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, Flores ha enfrentado obstáculos constantes en la capital del país, algo que su hijo atribuye a la falta de voluntad política.
La activista, tras ser dada de alta, manifestó su intención de cambiar de refugio, ya que la divulgación de su ubicación compromete su seguridad. En un nuevo video, reiteró su compromiso con la búsqueda de personas desaparecidas, afirmando que, a pesar de los riesgos, continuará con su labor.
“Aquí seguimos en la lucha, sin bajar la guardia, siempre para adelante en la búsqueda de nuestros desaparecidos”, enfatizó.
Ceci Flores, a pesar de las adversidades, sigue siendo una figura clave en la lucha por la justicia y la búsqueda de desaparecidos en México.