Internacional.- El ejército israelí realizó una acción militar de gran escala que provocó que al rededor de tres mil palestinos abandonaran el campo de refugiados de Yenín, al norte de Cisjordania.
A pesar de que se alertó de las dificultades para moverse debido a las carreteras cerradas y otras destruidas, las personas fueron evacuadas luego de que de acuerdo con los refugiados, el Ejército israelí lanzara un ultimátum y les diera dos horas para salir del campamento, un plazo que expiraría a medianoche, cuando se espera que se recrudezca la ofensiva.
Contraria a esta versión, un vocero militar indicó que no emitieron ninguna orden y que la gente ha salido voluntariamente. En las imágenes difundidas se observan a los miles de palestinos saliendo del campo, algunos con las manos en alto, y a tropas israelíes entrando en casas comprobando que no queda nadie.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, afirmó que las fuerzas israelíes estaban respondiendo a un reciente aumento de los ataques palestinos contra ciudadanos israelíes y habían realizado varias detenciones:
“Esta noche, las FDI han lanzado una amplia operación contra objetivos terroristas en Yenín. En los últimos meses, Yenín se ha convertido en un refugio para el terrorismo: estamos acabando con él”, declaró.
De igual manera se informó que durante una “amplia operación antiterrorista”, que incluyó ataques con drones, ejecutada por fuerzas israelíes en Yenín, en Cisjordania, fallecieron nueve palestinos y más de 80 personas resultaron heridas.
