Estados Unidos.- En el desarrollo de la audiencia final del caso de difamación presentado por la escritora E. Jean Carroll contra el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, se informó que este último abandonó abruptamente la sala mientras la abogada de Carroll, Roberta Kaplan, pronunciaba sus argumentos finales.
El veredicto publicado este 25 de enero abordó por segunda vez en nueve meses la afirmación de Carroll de que Trump la agredió en 1996.
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El juez del caso, Lewis Kaplan (sin relación familiar con la abogada), dejó constancia en el acta de que el acusado había abandonado la audiencia, resaltando la firmeza que ha demostrado durante el juicio.
Este caso tiene su origen en las acusaciones de agresión sexual que Carroll formuló contra Trump en relación con un incidente ocurrido en 1996. Un jurado, en su veredicto, otorgó a Carroll 83.3 millones de dólares adicionales en daños por difamación, sumándose a la indemnización previa de 5 millones por abuso sexual que se dictaminó en mayo pasado.
Trump, quien asistió regularmente al juicio, abandonó el edificio antes de conocerse el veredicto. Posteriormente, calificó la decisión como “absolutamente ridícula” y prometió apelar, sosteniendo que el sistema legal está siendo utilizado como “arma política”.
La abogada de Carroll, Roberta Kaplan, durante sus argumentos finales, instó al jurado a imponer una indemnización punitiva significativa con el objetivo de poner fin a las declaraciones públicas difamatorias de Trump. Este último, por su parte, continúa negando las acusaciones y defendiéndose en el ámbito legal.
A este nuevo jurado solo se le preguntó cuánto debería pagar Trump a Carroll por dos declaraciones que hizo como presidente cuando respondió a las preguntas de los periodistas después de que se publicaron extractos de las memorias de Carroll en una revista.
El jurado decidió compensar a Carroll con US$11 millones por daños a la reputación y US$7,3 millones por daños emocionales, así como la inesperada cantidad de U$65 millones en daños punitivos.
Para determinar los daños punitivos, los miembros del jurado tuvieron que decidir si Trump “actuó maliciosamente, por odio, mala voluntad o rencor, vengativamente o con desprecio sin sentido, imprudente o deliberado de los derechos de la señora Carroll”.
El veredicto del viernes es más de ocho veces lo que pidió originalmente la defensa de Carroll.
