Ciudad de México.- La Secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde, proporcionó detalles durante la conferencia matutina de este 7 de febrero sobre cómo se financiará la reforma de pensiones en México, denominada Fondo de Pensiones para el Bienestar, destacando diversas fuentes de recursos.
La principal fuente de financiamiento será el Instituto para Devolverle al Pueblo lo Robado, que recibirá recursos de operaciones vinculadas a confiscaciones realizadas por fiscalías como consecuencia de delitos. Asimismo, se utilizarán ingresos provenientes de la venta de terrenos gubernamentales, cobro a deudores, y recursos de la eliminación de fideicomisos, especialmente del Poder Judicial.
La Secretaria Alcalde detalló que el Fondo de Pensiones para el Bienestar contará con un capital semilla de 64,000 millones de pesos. Para alcanzar esta cifra, se emplearán recursos provenientes de la liquidación de la Financiera Rural, venta de terrenos de Fonatur, cobro de deudas de entidades públicas con el IMSS, ISSSTE y SAT, y de los fondos de las Afores, relacionados con la recuperación de cuentas.
La propuesta también contempla recursos complementarios, entre los cuales se incluyen los fondos de fideicomisos que fueron eliminados para la reconstrucción de Acapulco, aunque estos están actualmente impugnados. Además, se prevén ingresos provenientes de la posible extinción de órganos autónomos, una iniciativa también propuesta por AMLO.
“Los ahorros de la extinción de organismos autónomos, otra de las reformas de las que habremos de hablar más adelante, tienen que ver con la duplicidad de funciones y con extinguir estos órganos, entre comillas autónomos. 25 % de las utilidades que generen las empresas paraestatales, que están a cargo de Sedena y Marina, donde aquí ya se establece el fin específico que serán las pensiones. Y finalmente la capitalización de los rendimientos generados por este propio fondo que irán teniendo con el tiempo”, agregó.
La Secretaria mencionó que la reforma busca que los trabajadores puedan retirarse con el 100% de su último salario, beneficiando especialmente a aquellos que ganan o se pensionan con el salario promedio del IMSS, cifrado en 16,777 pesos. La iniciativa representa un esfuerzo por asegurar que los trabajadores reciban un monto más sustancial al jubilarse, marcando una diferencia significativa con las reformas anteriores.
Cabe destacar que esta propuesta se presenta en el contexto de la primera reforma al Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR) desde 1997, que redujo el requisito de cotización de 1,250 semanas a 750 semanas y aumentó la aportación total a la pensión del 6.5% al 15%, sin incrementar la cuota de los trabajadores.
En cuanto a los beneficiarios de esta nueva reforma, se espera que aquellos trabajadores formales de al menos 65 años que hayan cotizado en el IMSS desde 1997 o en el ISSSTE desde 2007 sean los principales destinatarios de los beneficios.
Esta propuesta representa un cambio significativo en el panorama de pensiones en México y será sujeta a la aprobación del Congreso. Se prevé que el Fondo de Pensiones para el Bienestar brinde un soporte económico más sólido a los jubilados, marcando un hito en los esfuerzos del gobierno por mejorar las condiciones de vida de los ciudadanos en su retiro.
