Baja California.- En una reciente revisión de muestreos regulares, la Comisión Estatal para Protección contra Riesgos Sanitarios de Baja California (COEPRIS BC) detectó niveles elevados de saxitoxina en el Alto Golfo de California, específicamente en el polígono de cosecha de moluscos bivalvos gestionado por una sociedad de pescadores. Estos hallazgos llevaron a la suspensión temporal de las actividades de recolección y comercialización en la zona.
La saxitoxina, una neurotoxina producida por el fitoplancton y algas consumidos por diversos organismos marinos, puede provocar síntomas como cólicos, espasmos abdominales, diarrea, vómitos, náuseas e incluso, en casos más graves, la incapacidad para mover brazos y piernas. La medida de suspensión se ha tomado para prevenir posibles afectaciones en la salud de la población.
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Las muestras recopiladas fueron analizadas por el Laboratorio Estatal de Salud Pública, arrojando resultados que superan el límite máximo permitido establecido en la normativa NOM-242-SSA1-2009. Con el objetivo de levantar la veda, se ha determinado que se requerirán tres resultados negativos consecutivos de la toxina, los cuales serán obtenidos a través de monitoreos continuos.
Este fenómeno natural, conocido como “marea roja”, se disipa por sí solo gracias a las corrientes marinas. Mientras tanto, la sociedad de pescadores afectada ha cooperado plenamente con las autoridades y respaldado la suspensión de las actividades para evitar riesgos a la salud de la comunidad.
Es esencial destacar que la sociedad de pescadores ha cumplido con la normativa NOM-031-SSA1-1993, que establece estándares de refrigeración y transportación de productos para la venta. Esto contribuye a garantizar la salud de los consumidores, ya que se especifica que la congelación debe mantenerse a un máximo de -18 ºC, reduciendo así los cambios enzimáticos y microbiológicos.
El personal de verificación de la COEPRIS BC realiza visitas regulares a las empresas dedicadas a la comercialización de estos productos, asegurándose de que cumplan con las especificaciones y garantizando la seguridad alimentaria para la población. La situación será monitoreada de cerca hasta obtener los resultados necesarios para levantar la veda y permitir la reanudación segura de las actividades pesqueras en la región.
