Estados Unidos.- Un domo de calor sin precedentes se ha intensificado sobre California y el oeste de Estados Unidos, elevando las temperaturas a niveles peligrosos en lo que constituye la primera ola de calor significativa del año en la región. El fenómeno, que comenzó el martes, ha provocado temperaturas récord en estados como California, Nevada, Arizona, Utah y el sur de Texas, y se espera que las temperaturas sigan subiendo hasta el final de la semana.
Este domo de calor, una gran área de altas presiones que atrapa el aire y lo calienta con abundante sol, ha generado temperaturas entre 11 y 13 °C por encima de lo normal en varios estados.
El Servicio Meteorológico Nacional ha emitido advertencias de calor excesivo para casi 19 millones de personas en California, Nevada, Arizona, Utah y el sur de Texas. Estas advertencias, las más extremas que se pueden emitir por calor, indican que se espera un calor generalizado y peligroso. Las noches tampoco ofrecerán alivio, ya que las temperaturas nocturnas se mantendrán elevadas, un signo del calentamiento global impulsado por la contaminación de combustibles fósiles.
El Valle de la Muerte en California, conocido por ser uno de los lugares más calurosos del mundo, podría alcanzar temperaturas de hasta 48.8 °C. En Las Vegas, las temperaturas máximas se esperan alrededor de 43.3 °C, empatando con el récord de temperatura más temprana del año alcanzada en 2010. Varias ciudades como Phoenix, Las Vegas, Flagstaff, Reno y Fresno podrían romper récords diarios de temperatura máxima esta semana.
La situación es igualmente crítica en Texas, donde ya se han batido numerosos récords. Las temperaturas han sido mortales en la frontera entre Texas y México, con al menos cuatro migrantes fallecidos por insolación y deshidratación el pasado fin de semana. El calor es la amenaza meteorológica más mortífera en Estados Unidos, matando más del doble de personas que los huracanes y los tornados juntos cada año.
Este domo de calor también está causando estragos en la salud pública. En Phoenix, 11 personas sufrieron agotamiento por calor durante un mitin de campaña y fueron hospitalizadas. En Las Vegas, el Departamento de Bomberos respondió a al menos 12 llamadas por exposición al calor, nueve de las cuales requirieron tratamiento hospitalario.
El cambio climático está intensificando estos eventos extremos. Las olas de calor nocturnas, que tienen un mayor impacto en la salud humana, están aumentando más rápido que las olas de calor diurnas debido al aumento de gases de efecto invernadero. Ciudades como Fresno y San Francisco han visto incrementos significativos en sus temperaturas nocturnas desde 1970, exacerbando el riesgo para aquellos sin acceso a aire acondicionado.
El domo de calor se está trasladando ahora hacia el noroeste de Estados Unidos, donde se espera que regiones como Oregon, Washington, Idaho y Colorado experimenten temperaturas inusualmente altas para esta época del año. Seattle, Portland y Denver podrían ver temperaturas entre 10 y 15 grados por encima de lo normal, extendiendo el impacto de este fenómeno meteorológico extremo.
