Los usuarios de una gasolinera señalada por la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO) por sus altos precios defienden la relación calidad-precio, asegurando que el costo elevado se justifica por la mejor calidad del combustible.
Aunque la PROFECO colocó una lona con la leyenda “No cargues aquí, se vuelan la barda con los precios” en una estación ubicada sobre la avenida Insurgentes en la colonia Colinas de San Jerónimo, los conductores continúan abasteciéndose en el lugar.
La gasolinera ofrece gasolina regular a $25.99 y premium a $26.99, precios superiores a los promedio en la ciudad, que varían entre $21.60 y $27.
Sin embargo, los usuarios argumentan que la gasolina importada que se vende en esta estación rinde un 15 a 20% más, lo que justifica su decisión de comprar allí.
La variación en los precios de gasolina se debe a la libre comercialización del combustible y a factores como los altos costos de renta de los terrenos donde se encuentran algunas estaciones, particularmente en áreas de alta plusvalía.
La PROFECO, encabezada por Iván Escalante Ruiz, ha llamado a las gasolineras de México a ajustar sus precios, recomendando que la gasolina regular se mantenga entre los $23 y $24 por litro.
Además de esta estación en Monterrey, PROFECO colocó lonas en gasolineras de Durango y Guanajuato, como parte de una campaña más amplia para controlar los precios en todo el país.