La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció este miércoles que solicitó a la Fiscalía General de la República que asuma la investigación sobre el hallazgo de restos óseos en una propiedad en Jalisco, un área controlada por delincuentes.
Esta decisión fue tomada debido a las fallas de las autoridades estatales en su manejo del caso.
Sheinbaum pidió que la Fiscalía federal “atraiga el caso de Jalisco” después de que activistas revelaran el descubrimiento la semana pasada, lo que expuso omisiones por parte de las autoridades locales, que ya habían intervenido en el predio seis meses antes.
En una conferencia de prensa, la mandataria expresó su apoyo al fiscal general, Alejandro Gertz Manero, quien había cuestionado la actuación de la Fiscalía de Jalisco y anunció que se abriría una nueva investigación.
Sheinbaum destacó la importancia de una investigación coordinada para aclarar responsabilidades.