Tijuana .- La Fiscalía General de la República (FGR) investiga a elementos de la Fuerza Estatal de Seguridad Ciudadana (FESC) de Baja California por su presunta participación en el robo de 180 kilogramos de cocaína, ocurrido el pasado 4 de octubre en la zona de Ojo de Agua, en Tijuana.
De acuerdo con la carpeta de investigación FED/BC/TIJ/0002996/2025, cámaras de videovigilancia captaron a los presuntos responsables a bordo de vehículos oficiales de la Secretaría de Seguridad Ciudadana del Estado (SSCBC). Las imágenes fueron clave para que el órgano interno de control iniciara una indagatoria sobre los agentes.
Fuentes de inteligencia refieren que el robo estaría vinculado con una disputa criminal entre grupos de narcotráfico. Los agentes habrían actuado en complicidad con el Cártel de los Arellano Félix (CAF) para apropiarse del cargamento, luego de que los traficantes intentaran moverlo “por la libre”, sin pagar cuota a ninguna organización.
La fiscal general del estado, María Elena Andrade Ramírez, confirmó que el caso está bajo investigación federal y advirtió que no habrá tolerancia para ningún funcionario implicado.
“Ya lo mencionó el secretario de Seguridad Ciudadana, el general Laureano Carrillo Rodríguez: es directamente contra agentes de la FESC, según las investigaciones de inteligencia. Si alguien anda en malos pasos, tiene que pagar”, señaló.
Andrade Ramírez subrayó que su corporación colabora con la FGR y también mantiene abiertas otras investigaciones sobre posibles actos de corrupción policial que afectan el trabajo de agentes honestos.
En cuanto a las narcomantas aparecidas en Tijuana y Playas de Rosarito, donde su nombre fue mencionado, la fiscal aclaró que no estaban dirigidas personalmente contra ella. “Menciona mi nombre, pero no nos vamos a prestar a ese tipo de situaciones. Es un trabajo serio y seguimos trabajando”, dijo.
