Tijuana, B.C. .- Atletas, padres de familia y usuarios de la Unidad Deportiva Tijuana, ubicada en la zona de la Ermita, alzaron la voz ante el deterioro de las instalaciones, el presunto mal uso de recursos y la falta de respuesta de las autoridades encargadas.
Usuarios habituales, deportistas de diversas disciplinas, madres y padres de familia manifestaron su inconformidad por la situación que ha llevado al deterioro generalizado del complejo deportivo.
Entre las principales quejas destacan que las albercas no cuentan con calderas en funcionamiento, lo que impide el entrenamiento y uso regular de los nadadores; además, los baños permanecen cerrados y algunos espacios presentan condiciones de abandono.
Los asistentes denunciaron también actitudes prepotentes y falta de atención al solicitar apoyo del administrador, quien —aseguran— ha hecho caso omiso a las peticiones.
Una de las denuncias más graves apunta a la presunta venta irregular de estacionamientos mensuales con recibos falsos, lo que sugiere un posible desvío de recursos. Asimismo, señalaron que la falta de seguridad en el área ha derivado en un incremento de incidentes delictivos dentro y fuera de las instalaciones.
Santiago, joven atleta y usuario de la alberca, expresó su molestia y preocupación. “Llevamos algunos días sin poder entrenar porque el agua está fría. Nos dijeron que ya se iba a arreglar, pero sigue igual”, comentó.
Tras la manifestación, Luis Ángel Luna Martínez, encargado de despacho del Instituto Municipal del Deporte de Tijuana (IMDET), acudió al lugar para atender a las familias inconformes. Luna informó que se sostendrá una reunión formal este miércoles con el objetivo de revisar las demandas y buscar una solución definitiva a los problemas reportados.
