Estados Unidos.- La exembajadora de Estados Unidos ante la ONU, Nikki Haley, anunció la suspensión de su campaña presidencial, asegurando la nominación republicana para Donald Trump. Esta decisión surge un día después del Súper Martes, donde Trump la derrotó en 14 de las 15 contiendas por la nominación republicana.
Aunque duró más que cualquier otro rival republicano de Trump, Haley nunca representó una amenaza seria para el expresidente. Su actuación destacada entre los republicanos moderados e independientes resalta cómo el estilo político incendiario de Trump podría hacerlo vulnerable en las elecciones presidenciales del 5 de noviembre.
Haley, de 52 años, planea dar un discurso para abordar su futuro en la carrera, sin realizar un respaldo en ese momento. Instará a Trump a ganarse el respaldo de sus seguidores, incluyendo a republicanos moderados y votantes independientes. A pesar de la derrota, Haley obtuvo el apoyo de donantes con el objetivo de evitar una tercera nominación presidencial consecutiva para Trump. Sin embargo, su actuación no convenció lo suficiente a los votantes conservadores ante el dominio continuo de Trump en la base del partido.
Aunque no será candidata, Haley afirmó que seguirá usando su voz para las causas en las que cree. Con esta decisión, Donald Trump enfrentará nuevamente a Joe Biden en las elecciones de noviembre.
La revancha entre Trump, de 77 años, y Biden, de 81, la primera repetición de la contienda presidencial estadounidense desde 1956, presenta una perspectiva que pocos estadounidenses desean. Las encuestas muestran bajos índices de aprobación para ambos candidatos. Biden ha retratado a Trump como un peligro para los principios democráticos, mientras que Trump persiste en sus falsas afirmaciones de victoria en 2020. La polarización política aumenta, y las elecciones prometen profundizar las divisiones en el país.
