México.- El Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, realizó un llamado este jueves para establecer un diálogo directo con los padres de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa. La intención es proporcionarles información detallada sobre los avances en la carpeta de investigación, reiterando su compromiso de no cerrar el caso.
Sin embargo, solicitó que no haya intermediarios en la conversación para evitar posibles conflictos en el proceso. La reunión está tentativamente programada para finales de marzo, dentro de aproximadamente 20 días.
A pesar de que la Fiscalía General de la República (FGR) inició un peritaje en la calle de Moneda, donde se derribó una puerta para acceder a Palacio Nacional, el presidente pidió que no se abriera una investigación sobre este incidente. Además, adelantó que, si se identifica a quienes participaron en la manifestación de Ayotzinapa, los exhibirá en su conferencia mañanera.
López Obrador expresó dudas sobre la participación de estudiantes de la normal rural de Ayotzinapa en la manifestación y anunció su intención de exhibir a los encapuchados que participaron en el incidente. Afirmó que, si se comprueba su participación, no están llevando a cabo un acto revolucionario, sino actuando a favor de los conservadores que, según él, han oprimido y explotado al pueblo.
“Les diría que eso no es revolucionario, eso es contrarrevolucionario, que es actuar como contras, a favor de los conservadores, de los que siempre han oprimido, explotado y robado al pueblo, y que no se dejen manipular si es que son estudiantes”, mencionó el Presidente.
El presidente también sugirió que la provocación podría provenir de sectores conservadores y organizaciones que buscan desestabilizar su administración.
Rechazó la idea de que el Estado o el Ejército estuvieran involucrados, señalando que tales acusaciones surgieron después de la intervención de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para socavar a las fuerzas armadas mexicanas.
En cuanto al diálogo con los padres de los desaparecidos, López Obrador expresó su disposición a reunirse con ellos en unos 20 días, preferiblemente sin abogados y asesores, argumentando que no confía en los representantes legales. Destacó la importancia de que las víctimas tengan acceso directo a la información completa sobre el caso y reafirmó su compromiso de mantener la investigación abierta hasta que se esclarezcan los hechos y se encuentre a los desaparecidos.
