Adrián Briseño, un músico originario de Ciudad Obregón, encontró en las calles de Tijuana su escenario de vida y supervivencia. Con 68 años a cuestas y enfrentando adversidades que van desde la pérdida de empleo hasta problemas de salud sin resolver, su historia es un testimonio de resiliencia y determinación.
Desde temprana edad, Briseño persiguió su pasión por la música, aventurándose hacia Estados Unidos para buscar oportunidades en el ámbito musical. Sin embargo, tras la llegada de la pandemia, se vio obligado a regresar a Tijuana, donde se ha ganado la vida tocando en las calles.
Te recomendamos: De acuerdo con encuesta Burgeño lidera preferencias a la Alcaldía
“El covid lo cambió todo. No me quedó más opción que tomar mi guitarra y salir a las calles a cantar, feo, pero con sentimiento”, expresó Briseño.
A pesar de su amor por el jazz y la batería, los recursos y el espacio para practicar son escasos. Además, enfrenta un desafío aún mayor: un posible tumor en el cuello que los médicos han identificado, pero que no puede tratarse debido a limitaciones económicas.
A diario, Briseño se presenta en la Avenida Revolución o en la esquina entre la calle 5.ª y Constitución, interpretando desde baladas clásicas hasta éxitos de la música ranchera, con la esperanza de ganar unas cuantas monedas para cubrir sus necesidades básicas.
“Para algunos, 1500 pesos de renta pueden no ser mucho, pero para mí, es una montaña que escalar todos los meses”, compartió Briseño, refiriéndose al desafío económico que enfrenta para mantener un techo sobre su cabeza y alimentarse.
A pesar de las dificultades, Briseño se aferra a la esperanza de poder algún día atender su salud y continuar su pasión por la música.
Además, Briseño tiene un bulto que sobresale de su cuello, presuntamente los doctores le han dicho que podría ser un tumor, pero no cuenta con el recurso suficiente para poder atenderse y hacerse la cirugía, tampoco cuenta con familiares que lo puedan apoyar.
Aunque no siente dolor, Adrián espera un día juntar lo suficiente para poder atenderse, ya que le preocupa pueda afectarle gravemente a su salud y le impida seguir trabajando.
