El multimillonario Elon Musk generó controversia este lunes durante un evento que tuvo lugar horas después de la toma de posesión de Donald Trump para su segundo mandato.
Ante un auditorio lleno de seguidores del presidente, Musk expresó su entusiasmo por los planes de llevar a cabo una misión tripulada a Marte durante la presidencia de Trump, calificando este logro como un punto de inflexión para la civilización humana.
Sin embargo, lo que realmente desató la polémica fue un gesto que muchos interpretaron como un saludo nazi. Mientras la multitud celebraba, Musk levantó su brazo de manera rígida y extendida, lo que algunos compararon con el saludo utilizado por el régimen de Adolf Hitler, conocido como “Sieg Heil”.
Este gesto desató una avalancha de reacciones en redes sociales. Mientras algunos condenaron el saludo, asociándolo con la ideología nazi, otros argumentaron que el gesto de Musk recordaba más a un saludo de la antigua Roma, como el de un general imperial o un gladiador.
Elon Musk no ofreció ninguna explicación sobre el gesto, y en su discurso se limitó a señalar que la victoria de Trump representaba algo más que un triunfo electoral, sino una “bifurcación en el camino de la civilización humana”, celebrando lo que él consideraba un avance significativo para la nación y la humanidad.