El ex alcalde de Tijuana, Jorge Ramos Hernández, quien alguna vez se jactó de defender los principios del Partido Acción Nacional (PAN), como la dignidad de la persona, el bien común, la solidaridad y la subsidiariedad, ahora resulta que se cambió de camiseta y se unió al Partido Verde Ecologista de México (PVEM), el mismo que va en alianza con Morena, el partido del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), a quien Ramos no se cansa de criticar.
En un video que circula en las redes sociales, se puede ver al ex panista hablando pestes de AMLO, de Morena, de la dedocracia y del autoritarismo que impera en ese movimiento. Sin embargo, al día martes 30 de enero, el PVEM anunció con bombo y platillo que Ramos se había integrado a sus filas y que además ocuparía el cargo de secretario nacional de Relaciones Institucionales, un puesto que suena muy importante, pero que nadie sabe qué hace.
Así, el camaleónico político, que ha ocupado diversos cargos públicos gracias al PAN, ahora se dice ecologista y se dispone a negociar con los mismos que antes denostaba. Aquí me hace recordar aquella frase bíblica que dice: “Mirad, yo os envío como ovejas en medio de lobos; por tanto, sed astutos como las serpientes e inocentes como las palomas”, que le viene como anillo al dedo ¿O será que solo le importa su bien personal y no el común?
Lo cierto es que el PAN no debe estar muy triste por la partida de Ramos Hernández, pues se llevó consigo a otras figurillas que tampoco aportaban mucho al partido.
Ahora, destaca como coordinador del ex boxeador Erik “El Terrible” Morales, quien aspira a ser el próximo alcalde de Tijuana, con su apoyo, quien siempre está unos pasos adelante de él, como si fuera su entrenador.
Morales, quien fue diputado federal por Morena, ahora quiere seguir su carrera política con el PVEM, el partido de las cuatro mentiras, pues ni es verde, ni es ecologista, ni es de México, ni es partido, aunque como Judas ya lo negó y se dice ser Morenista. ¿Qué nos depara esta dupla de Ramos y Morales? ¿Otras canchas fantasmas, como las que construyó el ex alcalde en su gestión? ¿Tener a los inspectores cobrando piso, como lo denunciaron los comerciantes? O peor aún ¿Endeudar nuevamente a la ciudad?, apenas vamos saliendo de esa.
Los tijuanenses tendrán que estar muy atentos a las propuestas de estos personajes, que más que políticos, parecen oportunistas. Y recordar que, como dice el refrán, “más vale malo por conocido, que bueno por conocer”.
