Published
4 weeks agoon
By
RedacciónMéxico.- El futbol mexicano enfrenta una nueva sacudida tras la renuncia de Juan Carlos Rodríguez como Alto Comisionado de la Federación Mexicana de Futbol (FMF), anunciada este viernes durante la reunión de dueños. La decisión se produjo tras el rechazo de varios propietarios a su ambicioso proyecto de un Fondo de Inversión de 1,300 millones de dólares, diseñado para transformar la estructura financiera y operativa de los clubes.
Rodríguez, apodado “La Bomba”, buscaba implementar una estrategia que exigía una inversión inicial de 70 millones de dólares por equipo, con supervisión estricta a través de la empresa Apollo Management Global. Sin embargo, la falta de consenso y la resistencia de algunos propietarios frenaron la iniciativa. Según trascendió, la negativa se debía a que el plan implicaba una fiscalización exhaustiva de las finanzas y contratos de los equipos, algo que muchos rechazaron de plano.
Te recomendamos: Revendedores obligados a ajustar precios para la final del Apertura 2024
El costo del fracaso
El colapso del proyecto deja tras de sí pérdidas de casi cinco millones de dólares invertidos en su desarrollo, además de posibles demandas legales de Apollo Global Management, que podría exigir una indemnización por la cancelación del acuerdo. A esto se suma la incertidumbre sobre el futuro del futbol mexicano, con impactos potenciales en varias áreas clave:
Un vacío de poder
La salida de Rodríguez también deja al futbol mexicano sin un liderazgo claro. En este escenario, las alianzas entre los grandes grupos de poder, como Orlegi y Grupo Pachuca, podrían derivar en una pugna interna que defina el futuro del deporte. Se espera que una asamblea extraordinaria en enero intente dar rumbo a la situación, aunque sin planes revolucionarios en el horizonte.
El legado de “La Bomba”
Designado en 2022 para liderar un cambio estructural en la FMF, Rodríguez llegó con grandes propuestas, pero se retira sin haber cumplido sus objetivos. Su renuncia confirma lo que muchos críticos señalan como un problema endémico: el futbol mexicano, necio y resistente al cambio, parece condenado a perpetuar sus vicios en lugar de evolucionar.
La frase del italiano Tomasi di Lampedusa en El Gatopardo resume el panorama actual: “Si queremos que todo siga como está, es necesario que todo cambie”. Un movimiento que, en el caso del futbol mexicano, parece destinado a mantenerlo atrapado en su propio ciclo de crisis y declive.
César “Chino” Huerta firma con el Anderlecht de Bélgica.
Luis Romo rompe el silencio tras su salida de Cruz Azul
Super Bowl LIX: Fecha, lugar y equipos favoritos
Vinicius Jr. expulsado tras agresión al portero Dimitrievski en Mestalla
México inicia su preparación para el Mundial 2026 con gira por Sudamérica
Wayne Rooney deja el cargo de entrenador del Plymouth Argyle