El gobernador de Chiapas, Eduardo Ramírez Aguilar, anunció la prohibición de las peleas de gallos y las carreras de caballos en el estado, con el objetivo de reducir los conflictos y mejorar la seguridad.
La medida fue presentada el lunes 13 de enero durante una conferencia de prensa, tras una reunión con la Mesa de Seguridad, donde se acordó erradicar estas actividades, tanto en ferias como en eventos masivos. “Quedan prohibidas de manera categórica. Cualquier actividad clandestina de este tipo será sancionada con todo el peso de la ley”, afirmó Ramírez Aguilar, quien destacó que esta decisión fue tomada junto a las Fuerzas Armadas y autoridades locales.
La prohibición ha generado diversas reacciones. Algunos municipios, como Ocosingo y Villaflores, han expresado su apoyo. La alcaldesa de Villaflores, Valeria Rosales Sarmiento, subrayó que estas actividades suelen ser focos de delincuencia, poniendo en peligro a las familias.
Ciudadanos en redes sociales han elogiado la medida, argumentando que estas tradiciones deben evolucionar y que su práctica fomenta el maltrato animal y los conflictos. “Adelante, Gobernador. Las tradiciones no deben justificar la violencia ni el sufrimiento animal”, comentó un usuario.
Sin embargo, empresarios y aficionados a estas actividades han expresado su rechazo, calificando la medida como un ataque a las tradiciones y la economía local. Algunos galleros han convocado una “Marcha por nuestras tradiciones” para el jueves 16 de enero, pidiendo que se revierta la decisión. “Estas prácticas son parte de nuestra identidad. Muchas familias dependen de ellas”, argumentaron los opositores en redes sociales, algunos de los cuales criticaron al gobierno por centrarse en medidas populistas en lugar de abordar problemas más graves como la delincuencia organizada.
Mientras persisten los debates, el gobernador ha reafirmado su postura, asegurando que la prohibición forma parte de una estrategia integral para garantizar la seguridad y tranquilidad en el estado.