Tijuana .- Un grupo de vecinos de Hacienda Agua Caliente y Lomas de Agua Caliente se manifestó en el Palacio Municipal para exigir al alcalde Ismael Burgueño que detenga la construcción de dos proyectos multifamiliares en la zona, argumentando que el uso de suelo fue cambiado de manera arbitraria y en contra de la normatividad vigente.
Con pancartas en mano y consignas contra los “violadores seriales del desarrollo urbano de Tijuana”, los inconformes denunciaron que, a pesar de haber obtenido amparos favorables para frenar estas construcciones, las autoridades han hecho caso omiso.
Según explicó José Miguel Olea Castro, integrante de la asociación de vecinos de Las Plazas en Hacienda Agua Caliente, el conflicto comenzó hace aproximadamente cuatro años, cuando un desarrollador obtuvo licencia para construir 120 departamentos en Las Plazas, un terreno que, aseguran, está destinado exclusivamente a viviendas unifamiliares. Los vecinos interpusieron un amparo que ganaron, logrando la suspensión de la obra.
Sin embargo, el desarrollador insistió con otro proyecto de 30 casas, obtuvo nuevamente el permiso y los vecinos volvieron a ampararse y ganaron, pero la obra nunca fue detenida.
En el caso de Hacienda Agua Caliente, en la calle Jazmines, los vecinos denunciaron que dos terrenos destinados a casas unifamiliares fueron fusionados para construir 12 departamentos, lo cual también generó amparos que han sido ignorados.
“A pesar de que los jueces nos han dado la razón, no hay autoridad que detenga estas obras. El problema viene desde administraciones pasadas y sigue ocurriendo en la actual”, enfatizó Olea Castro.
Autoridades prometen revisar el caso
Por su parte, la Secretaría de Desarrollo Territorial en Tijuana (SDTUA) se comprometió a analizar los casos en conjunto con la Consejería Jurídica para dar una respuesta a los afectados.
Los vecinos también solicitaron la revisión legal del proyecto Altum de la desarrolladora Encasa, así como el caso de Jazmines y Plaza Altezza, asegurando que estas obras han continuado a pesar de órdenes judiciales que ordenaban su suspensión.
“El proyecto Altum ya lleva más de diez pisos, aunque un juez ordenó detenerlo. En Jazmines, la construcción sigue avanzando. Plaza Altezza incluso ya está vendiendo y rentando locales, aunque hay un litigio en curso. Exigimos la clausura inmediata de estas construcciones”, afirmó el abogado de la asociación, Juan Marcos Gutiérrez González.
Mientras el Ayuntamiento de Tijuana revisa los procesos, Encasa seguirá construyendo y ofertando sus propiedades, en lo que los vecinos consideran un acto de impunidad y omisión por parte de las autoridades municipales.
