Ciudad de México.- La virtual presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo, ha presentado un ambicioso plan para implementar nuevas rutas de trenes de pasajeros en México, que aspira a emular el modelo del Tren Maya en términos de impacto y alcance. Este proyecto no solo busca mejorar la conectividad en el país, sino también generar empleo y fomentar el desarrollo regional a través de la inversión en infraestructura ferroviaria.
Sheinbaum ha delineado tres rutas principales que abarcarán un total de 1,778 kilómetros de los 3,000 kilómetros de tren de pasajeros que su administración pretende construir. Estas rutas incluyen el Tren AIFA-Pachuca, el Tren México-San Luis Potosí-Monterrey-Nuevo Laredo, y el Tren México-Querétaro-Guadalajara. Estas rutas se desarrollarán principalmente en el Bajío y el norte del país, utilizando trenes eléctricos con una velocidad de hasta 160 kilómetros por hora, con una fuerte preferencia por la construcción nacional.
Detalles
- Tren AIFA-Pachuca: Este tren conectará el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) con Pachuca, Hidalgo, beneficiando a municipios como Zumpango, Tecámac, Tizayuca, entre otros. Se espera que esta ruta esté lista en agosto de 2029.
- Tren México-San Luis Potosí-Monterrey-Nuevo Laredo: Con una extensión de 1,143 kilómetros, esta ruta facilitará la interconexión y el desarrollo regional a lo largo de su trayecto. Se prevé que esta línea esté operativa en diciembre de 2029.
- Tren México-Querétaro-Guadalajara: Inicialmente con 581 kilómetros de longitud, esta ruta podría eventualmente extenderse hasta Nogales, Sonora, conectando el Pacífico. La fecha estimada de finalización es abril de 2029.
Sheinbaum ha indicado que ya están en conversaciones con Jesús Antonio Esteva Medina, próximo secretario de Comunicaciones y Transportes, para analizar el derecho de vía con los concesionarios ferroviarios. La idea es que los concesionarios mantengan su permiso para trenes de carga mientras el gobierno federal introduce los trenes de pasajeros. Se planea seguir un esquema similar al del Tren Maya, involucrando tanto a ingenieros militares como a empresas privadas.
El proyecto no solo pretende mejorar la conectividad en México, sino también generar una considerable cantidad de empleos y fomentar el desarrollo económico a través de la obra pública. Sheinbaum subraya que el desarrollo de estos trenes permitirá una mayor movilidad para la población, ofreciendo un transporte público más económico y menos contaminante. Además, se espera que la fabricación de los trenes en México contribuya a la economía local, con posibles colaboraciones con empresas como Alstom, CAF y CRRC Zhuzhou Locomotive.
Uno de los principales desafíos será la negociación del derecho de vía con los concesionarios actuales, como Ferromex y Canadian Pacific Kansas City (CPKC). Sheinbaum ha señalado que de no haber interés por parte de estas empresas, el gobierno federal podría recurrir a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) o a la Secretaría de Marina para llevar a cabo la construcción, siguiendo el modelo del Tren Maya y el Corredor Transísmico.
Además, se contempla la posibilidad de mover las vías de tren de carga y construir nuevas vías para los trenes de pasajeros, lo cual sería más costoso pero permitiría una mayor velocidad y seguridad en el servicio.
