Estados Unidos.- Un hombre acusado de prender fuego a una mujer hasta causarle la muerte en una estación del metro de Nueva York fue acusado formalmente de homicidio e incendio deliberado, según informó la agencia AP. El acusado, identificado como Sebastián Zapeta, enfrenta cargos que podrían derivar en una sentencia de cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
De acuerdo con el fiscal de distrito de Brooklyn, Eric Gonzalez, el acta de acusación será desprecintada el 7 de enero. González señaló que el ataque fue “un acto malicioso” y que la víctima se encontraba dormida y vulnerable en el momento del incidente.
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Según AP, Zapeta, de 33 años y originario de Guatemala, había ingresado ilegalmente a Estados Unidos tras ser deportado en 2018. Las autoridades detallaron que el hombre prendió fuego a la ropa de la mujer con un encendedor mientras esta se encontraba inmóvil en la estación de Coney Island. Acto seguido, agitó una camisa para avivar las llamas y luego observó cómo la víctima quedaba envuelta en fuego.
La agencia AP también informó que la policía detuvo a Zapeta más tarde ese mismo día, mientras viajaba en un tren de la misma línea. La identidad de la mujer aún no ha sido confirmada, pero las autoridades están utilizando huellas dactilares y técnicas avanzadas de ADN para lograrlo.
El incidente, reportado inicialmente por AP, ocurrió en un contexto de creciente preocupación por la seguridad en el sistema de transporte público más grande del país. Aunque los datos de la policía muestran una disminución general en los principales delitos en el metro de Nueva York este año, los homicidios han aumentado, con nueve asesinatos registrados hasta noviembre, en comparación con cinco en el mismo periodo del año pasado.
El alcalde Eric Adams, citado por AP, declaró que muchos de los incidentes de alto perfil en el metro involucran a personas con problemas de salud mental. Adams también ha ordenado a la policía que colabore con el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) para evaluar la posibilidad de presentar cargos federales contra Zapeta bajo la legislación sobre incendios deliberados.
El domicilio de Zapeta, según AP, corresponde a un refugio para personas que padecen abuso de sustancias. Este caso ha renovado el debate sobre la seguridad en el metro y sobre cómo manejar a las personas que enfrentan problemas de salud mental y adicciones en entornos públicos.
Las autoridades locales han reiterado que los cargos presentados por la oficina del fiscal podrían derivar en la pena más severa para Zapeta, buscando justicia para la víctima y seguridad para los usuarios del metro.
