Tijuana .- Familiares y amigos de Martha Molina, quien desapareció en un retiro espiritual en Rosarito el 7 de mayo de 2023 y fue localizada sin vida el 1 de enero en el Cerro Coronel, le dieron el último adiós con una emotiva misa en la Parroquia Divino Maestro y Nuestra Señora de Guadalupe, en el Parque Industrial Otay.
Su hijo, Rafael Rivera, expresó su tristeza, pero también el consuelo de que su madre finalmente está de vuelta con la familia. Además, hizo un llamado a las autoridades para exigir justicia.
“Era muy alegre, la voy a recordar con mucho amor y mucha alegría. Vino toda la colonia porque mi mamá era una gran mujer, un excelente ser humano”, mencionó.
Al finalizar la misa, los familiares se dirigieron en caravana a la casa de Martha en Otay Jardín, donde aún la espera su perrita Loki, a quien rescató y cuidó durante tres años. Myriam Lezama, amiga cercana, destacó la bondad de Martha y su amor por los animales, recordando que antes de su desaparición había rescatado a cinco más.
“Después de la desaparición de Martha, Loki estuvo esperándola en la puerta, no se movía de ahí. Ahora Martha descansa, pero nosotros seguiremos pidiendo justicia”, expresó Myriam.
En un momento conmovedor, Loki pudo despedirse de su dueña, permaneciendo junto a su féretro por un instante antes de la sepultura en el Panteón Monte de los Olivos.
