Agentes del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE) habrían investigado a los migrantes deportados a El Salvador, revisando su información para confirmar si eran miembros de la pandilla venezolana Tren de Aragua, según una nueva declaración judicial de un funcionario de la agencia.
Medios de Estados Unidos informaron que la deportación de la mitad de los 261 migrantes se realizó bajo la Ley de Enemigos Extranjeros. Robert Cerna, director interino de la oficina de operaciones del ICE, defendió que la agencia no solo se basó en publicaciones en redes sociales, fotos o tatuajes relacionados con pandillas, sino que utilizó varios métodos para tomar decisiones.
Cerna destacó que los miembros de Tren de Aragua representan una amenaza significativa para la seguridad pública, involucrándose en actividades ilícitas para generar miedo y supremacía en diversas comunidades. A pesar de que muchos de los deportados no tenían antecedentes penales en EE.UU., Cerna explicó que esto se debía a su corta estancia en el país.
