México.- La tierra azteca es conocida por la riqueza de sus hábitats naturales y paisajes impresionantes, albergando aproximadamente el 10-12% de la biodiversidad mundial. Sin embargo, el país es testigo de la trágica realidad de la violencia contra aquellos que defienden la tierra y el medio ambiente. La situación de los activistas medioambientales en México, quienes luchan valientemente por proteger los recursos naturales del país enfrentan una violencia alarmante que necesita ser atendida.
De acuerdo con informes de instituciones como Amnistía Internacional, Global Witness y el Centro Mexicano de Derecho Ambiental, se han registrado 108 asesinatos de activistas en México en la última década, de los cuales 86 eran indígenas. Esto sitúa a México como uno de los países con mayor número de crímenes contra defensores del medio ambiente a nivel global.
Paulina Gómez, Isaac Herrera Avilés y Jaime Jiménez Ruiz son solo algunos ejemplos de activistas ambientales que perdieron la vida en México por oponerse a proyectos que amenazaban el medio ambiente.
“Hoy es un día maravilloso después de muchos días que afectara seriamente el frente frío, bajas temperaturas, nubes, poca lluvia. Hoy, la mariposa vuela y vuela buscando agua como lo hace todos los días”, mencionó en un video Homero Gómez González, en donde invitaba a los turistas al santuario El Rosario. Su caso conocido como El guardián de las mariposas monarca, permanece impune a cuatro años de su muerte.
Gómez González, ingeniero agrónomo y activista ambiental, dirigía la Reserva de Mariposas Monarca de Rosario en Ocampo, Michoacán, y era el portavoz para esta reserva.
Impulsó también una fórmula exitosa que incluía a los campesinos en los trabajos de reforestación y preservación del bosque, generando empleos en una región rica en recursos naturales pero azotada por la pobreza.
Con el paso del tiempo ganó popularidad en las redes sociales y su causa comenzó a resonar, sin embargo, fue encontrado sin vida en 2020 en un pozo en Michoacán, después de haber sido víctima de desaparición forzada. Su trabajo en contra de la tala ilegal de árboles lo convirtió en blanco de la delincuencia organizada.
Óscar Eyraud Adams, defensor en la comunidad Kumiai de Juntas de Nejí en Tecate, Baja California, fue asesinado en 2020 tras el despojo provocado por pozos de agua de empresas trasnacionales en su municipio.
Otro caso es el de Samir Flores, quien fue defensor del territorio en Amilcingo, municipio de Temoac. En 2011 se enteró que un gasoducto pasaría por sus tierras y que se construirían dos termoeléctricas en la comunidad de Huexca, en Yecapixtla, por lo que comenzó un movimiento contra dicho proyecto. Y como el cientos de nombres hacen eco en la lucha ambientalista.
A pesar de los riesgos que enfrentan, los activistas medioambientales en México luchan contra intereses poderosos sin el respaldo adecuado. Muchos se enfrentan a empresas extractivas y desarrolladores inmobiliarios sin el apoyo necesario por parte de las autoridades.
Hasta el momento no existe algún tipo de legislación que proteja a los ambientalistas que día a día luchan por conservar los hábitats en el país. Un reciente estudio elaborado por la coalición de organizaciones civiles Noroeste Sociedad Civil para la Sustentabilidad Ambiental determina que entre 2016 y 2021, las inversiones federales destinadas al ambiente se redujeron año tras año.
En el año 2020, se reportaron 30 asesinatos de defensores de la tierra y el ambiente, lo que representa un aumento del 67%, siendo además el segundo país con más crímenes hacia activistas a nivel mundial, con 227 ataques.
Es evidente que México enfrenta un grave problema de violencia contra los activistas medioambientales, quienes arriesgan sus vidas por proteger la tierra y el medio ambiente. Las autoridades deben tomar medidas urgentes para proteger a estos defensores y garantizar que se investiguen y sancionen los ataques.
El país necesita fortalecer su compromiso con la conservación del medio ambiente y proporcionar el apoyo necesario a aquellos que dedican sus vidas a esta causa, con políticas públicas que los respalden. La valentía de los activistas debe ser reconocida y respaldada por políticas y acciones concretas.
Estos son los nombres de los ambientalistas que de acuerdo con el reporte de Global Witness fueron asesinados en México en 2022:
- Antonio de la Cruz
- Cynthia de la Cruz
- Noé Godínez Arredondo
- Francisco Vázquez Domínguez
- Filogonio Martínez Merino
- Patricia Rivera Reyes
- Iván Merino Flores
- Héctor Soto Rodríguez
- Luis Donato Ortiz
- Humberto Valdovinos Fuentes
- Alberto Morales Sebastián
- Crispín Reyes Pablo
- Nicolás Pérez Xoyateco
- Teófilo Barrera Herrera
- Marcelo Carrera Reyes
- Omar Herrera Raymundo
- Marcos Campos Ahuejote
- Lorena Chantzin Paxacuasingo
- Adán Linares Silverio
- Guillermo Hilario Morales
- Moisés Cuapipistenco
- Javier Campos Morales
- Joaquín César Mora Salazar
- Pedro Palma
- José Trinidad Baldenegro
- Pedro Pascual Cruz
- Rosendo González Torres
- Estanislao González Carrillo
- Verónica Patricia Guerrero Vinueza
- Jesús Bañuelos Acevedo
- Jesús Manuel García Martínez
